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Los Andes, Chile – Tras casi una semana de intensa búsqueda, las autoridades confirmaron el hallazgo del cuerpo sin vida del empresario Juan Antonio Campos Arancibia, de 62 años, quien había sido reportado como desaparecido el pasado viernes 23 de mayo. El cadáver fue encontrado enterrado en una zanja del sector rural de Portezuelo Amarillo, en la región de Valparaíso, a unos 110 kilómetros de Santiago.
El delegado presidencial de Los Andes, Cristian Aravena, informó que la identidad de la víctima fue confirmada por la Policía de Investigaciones (PDI) mediante peritajes del laboratorio de criminalística y el Servicio Médico Legal, a través del cotejo de huellas dactilares, ya que el cuerpo presentaba múltiples lesiones en el rostro y no era reconocible a simple vista.
El hallazgo fue posible gracias a la detención de tres ciudadanos colombianos, uno de los cuales confesó su participación en el crimen y proporcionó las coordenadas exactas del lugar donde fue inhumado el cuerpo. Dos de los implicados se encontraban en situación migratoria irregular y el tercero con un permiso vencido.
La búsqueda contó con el apoyo de perros adiestrados y drones facilitados por el municipio. La Brigada de Homicidios (BH) de la PDI de Los Andes señaló que el cuerpo fue enterrado a solo 20 centímetros de profundidad.
Según los antecedentes recabados por el Ministerio Público, el empresario fue visto por última vez cuando salió de su lugar de trabajo a bordo de su camioneta Mitsubishi L200 roja. Al día siguiente, el vehículo fue encontrado abandonado en las cercanías de un punto de reciclaje en la ciudad de Los Andes. Las autoridades también confirmaron movimientos bancarios irregulares tras su desaparición, lo que vincula el crimen con la sustracción de dinero.
El subprefecto Hernán García, jefe de la Brigada de Homicidios de Los Andes, explicó que uno de los detenidos confesó el delito y reveló el lugar exacto donde estaba enterrado el cuerpo. La Fiscalía solicitó mantener la causa en carácter de secreta y se amplió la detención de los acusados, quienes serán formalizados por el delito de robo con homicidio. No se descarta que esta calificación quede firme, ya que no hubo solicitud de rescate, lo que descartaría formalmente el delito de secuestro.
Cabe destacar que, en enero de este año, un sobrino nieto del empresario también fue víctima de un secuestro, aunque en esa ocasión fue liberado tras el pago de un rescate en la comuna de Lampa.
El caso ha generado conmoción en la comunidad local y reabre el debate sobre la seguridad y la migración irregular en el país. La investigación continuará bajo reserva durante los próximos 40 días.
