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Caracas.– La cúpula militar venezolana ha intensificado su respuesta tras las recientes acusaciones de Estados Unidos que señalan al denominado “Cartel de los Soles” como organización terrorista y a Nicolás Maduro como cabecilla, además de aumentar a 50 millones de dólares la recompensa por su captura y desplegar activos aéreos y navales en el sur del mar Caribe.
El gobierno de Venezuela ha intentado minimizar el impacto de estas medidas, iniciando con una serie de videos de oficiales y funcionarios de distintos rangos que leyeron mensajes dirigidos contra la fiscal estadounidense Pamela Bondi, aunque sin mayor eco dentro o fuera de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB). Posteriormente, el ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López, emitió declaraciones públicas en las que acusó a Washington de “imponer una narrativa para agredir a Venezuela”.
Durante la conmemoración del décimo aniversario de la promoción “GJ José Félix Ribas”, Padrino aseguró que las acusaciones forman parte de un “gran aparato comunicacional” para difundir falsos positivos. Señaló que la decisión de Estados Unidos responde a intereses políticos y cuestionó el despliegue militar en el Caribe, preguntándose por qué no se realizan operativos similares en el Pacífico, por donde transita la mayor parte de la droga hacia Norteamérica.
El ministro afirmó que las acusaciones buscan preparar el terreno para una agresión y comparó la estrategia comunicacional estadounidense con la propaganda nazi. “La guerra se construye como una escalada y Venezuela enfrenta una batalla entre la verdad y la mentira, en la que el aparato mediático imperialista logra que las falsedades se conviertan en verdades”, expresó.
El Ministerio de la Defensa también emitió un comunicado en el que rechazó “categóricamente” las declaraciones de la fiscal Bondi y calificó como “fantasiosas e ilegales” las recompensas y acusaciones contra Maduro. El texto denunció injerencia en los asuntos internos del país y criticó la política estadounidense, señalando que su sociedad enfrenta graves problemas de adicción sin soluciones efectivas.
En el documento, la FANB resaltó supuestos logros en la lucha antidrogas, como la neutralización de 398 aeronaves vinculadas al narcotráfico desde 2012 y la incautación de más de 51 toneladas de droga en 2025. También reafirmó su lealtad a Maduro, advirtiendo que Venezuela no aceptará “ultimátums ni chantajes” de potencias extranjeras.
La tensión entre ambos países aumenta en medio del despliegue militar estadounidense en la región, mientras Venezuela insiste en que las acusaciones forman parte de un plan de desestabilización política.