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Utah, EE.UU. – Las autoridades revelaron este viernes un inquietante hallazgo en el caso del asesinato del activista conservador Charlie Kirk: tres casquillos sin disparar en la recámara del fusil presuntamente utilizado por el sospechoso, Tyler Robinson, presentaban mensajes grabados en sus laterales.
El arma, un rifle de cerrojo Mauser modelo 98 con mira telescópica, no solo llamó la atención por su antigüedad y características, sino por las inscripciones encontradas en las balas. Entre ellas, frases como:
“¡Oye, fascista! Agárrame!”, acompañado de flechas en distintas direcciones.
“Oh bella ciao, bella ciao, bella ciao ciao ciao”, en referencia a la célebre canción antifascista italiana.
“Si lees esto, eres gay, jajaja LMAO”, con tono burlesco.
Incluso el casquillo disparado llevaba la inscripción: “Se da cuenta, se abulta, OWO, ¿qué es esto?”, expresión tomada del argot digital.
El gobernador de Utah, Spencer Cox, calificó el hallazgo como inusual y confirmó que forma parte de la investigación en curso. La referencia a “Bella Ciao”, himno antifascista popularizado tras la Segunda Guerra Mundial, refuerza la hipótesis de una motivación política en el ataque.
La radicalización del sospechoso
Robinson, ex estudiante de 22 años de la Universidad del Valle de Utah, habría mostrado en los últimos meses un creciente nivel de hostilidad hacia Charlie Kirk y sus posturas conservadoras. Un amigo cercano declaró que, días antes del ataque, el joven manifestó estar indignado por la visita de Kirk al campus y lo calificó de “lleno de odio”.
La cacería humana de 33 horas concluyó cuando Robinson fue entregado a las autoridades por su propio padre. Según fuentes policiales, el joven llegó a expresar su intención de suicidarse antes de rendirse, pero finalmente accedió tras la mediación de un ministro religioso allegado a la familia.
El director del FBI, Kash Patel, acompañó al gobernador Cox en la conferencia de prensa y cerró con un homenaje a Kirk: “Nos vemos en el Valhalla”.
Robinson no tenía antecedentes penales, aunque los investigadores rastrean ahora sus últimas actividades en Discord y los testimonios de amigos y compañeros de cuarto, quienes aportaron detalles sobre su huida y la ubicación del rifle.
