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Dos cazas F-16 de la Fuerza Aérea Rumana despegaron de urgencia este sábado tras la detección de un dron ruso que violó el espacio aéreo del país, en un incidente que el Gobierno calificó como un acto de agresión.
El ministro de Defensa, Ionuț Mosteanu, informó que la aeronave no tripulada ingresó en la región de Tulcea, a unos 20 kilómetros de la frontera con Ucrania, en medio de ataques rusos contra infraestructura ucraniana en el Danubio. El dron desapareció del radar poco después, sin que la población local corriera peligro.
“Rumanía defiende su espacio aéreo y se mantiene vigilante ante la agresión rusa”, declaró Mosteanu, quien advirtió que cualquier futura incursión será respondida con el derribo inmediato, siguiendo el precedente establecido en Polonia.
El Ministerio de Defensa detalló que el aparato fue detectado a las 18:23 hora local, y que equipos especializados se encuentran desplegados en la zona para ubicar posibles restos del dron, que podría haberse estrellado cerca de Chilia Veche.
Mosteanu enfatizó que el episodio no fue un accidente, sino “una provocación, una prueba de la reacción de la OTAN”. Aseguró además que el país actúa en coordinación con el centro de mando aliado y que los sistemas antiaéreos en el norte de Dobrogea permanecen listos para responder en cualquier momento.
El incidente se suma a una serie de incursiones recientes de drones rusos en el espacio aéreo de países vecinos, lo que eleva la tensión regional y refuerza la cooperación militar de Rumanía con sus aliados de la OTAN.
