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Nueva York.– Una pareja residente en el condado de Suffolk fue acusada de operar una red de narcotráfico a gran escala tras una investigación encubierta que llevó a la confiscación de drogas por un valor aproximado de 2 millones de dólares, incluyendo suficiente fentanilo como para causar la muerte de más de 42,000 personas, según informaron las autoridades.
Los acusados y los cargos
Los señalados son Caleb Moran y Jessica Medina Rivas, ambos de 28 años, quienes enfrentan un total de 56 cargos combinados por delitos de narcóticos, entre ellos operar como traficantes importantes, la acusación más grave de drogas en el estado de Nueva York.
De ser hallados culpables, podrían enfrentar sentencias que van desde 15 años de prisión hasta cadena perpetua. Ambos fueron procesados y puestos en libertad bajo fianza de dos millones de dólares cada uno.
“Una bomba de relojería” en un vecindario tranquilo
El fiscal de distrito de Suffolk, Ray Tierney, calificó la operación como una de las redadas más grandes en la historia del condado.
“Esto no fue solo una redada antidrogas. Fue una bomba de relojería en medio de un barrio tranquilo”, declaró Tierney durante la presentación del caso.
Investigación encubierta
La investigación comenzó el 11 de julio de 2025, cuando un detective encubierto contactó a Medina Rivas para acordar la compra de cocaína. A partir de esa operación inicial, las autoridades lograron recopilar pruebas que culminaron con la gran redada antidrogas.
Próximas audiencias
Medina Rivas deberá presentarse nuevamente ante el tribunal el 27 de octubre, mientras que Moran tiene audiencia programada para este martes.
