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Nueva York, EE.UU. — A tan solo cuatro meses de su esperada actuación en el Super Bowl 2026, el artista puertorriqueño Bad Bunny dejó claro en su reciente participación en Saturday Night Live (SNL) que no piensa quedarse callado ante las políticas represivas ni los discursos de odio que afectan a la comunidad latina en Estados Unidos.
Un monólogo con mensaje en horario estelar
Durante su monólogo de apertura en SNL, emitido a inicios de octubre, Benito Martínez —nombre real del artista— combinó humor y crítica social en un poderoso discurso que no dejó títere con cabeza.
“Estoy muy feliz. Todos están contentos. Incluso Fox News”, dijo con ironía mientras arrancaba su presentación.
El cantante utilizó un ingenioso sketch con clips manipulados de presentadores de la cadena conservadora Fox News, haciéndolos decir que «Bad Bunny es mi músico favorito y debería ser el próximo presidente». La sátira sirvió como antesala para un mensaje más profundo y contundente.
Un mensaje claro: “Nadie borrará nuestra huella”
En su discurso, el reguetonero resaltó la importancia de la comunidad latina en Estados Unidos y la lucha constante por reconocimiento y respeto:
“Especialmente a todos los latinos y latinas en todo el mundo, y aquí en Estados Unidos, a todas las personas que han trabajado para abrir puertas… Más que un logro mío, es un logro de todos”.
Cerró su intervención con una frase directa y desafiante:
“Y si no entendiste lo que acabo de decir, tienes cuatro meses para aprenderlo”.
Críticas al gobierno de Trump y rechazo a la gira por EE.UU.
Bad Bunny también aprovechó su visibilidad para criticar las políticas migratorias promovidas por el expresidente Donald Trump, como la reactivación de patrullas fronterizas y otras medidas represivas, razón por la cual el artista ha rechazado hacer giras por suelo estadounidense en el pasado reciente.
Rumbo al Super Bowl 2026: Una actuación histórica en camino
Bad Bunny será el primer artista latino solista en protagonizar el show de medio tiempo del Super Bowl, que se celebrará en febrero de 2026. Su presencia no solo representa un hito para la música urbana, sino también una reivindicación del poder cultural latino en uno de los escenarios más importantes del mundo.
