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Miami. – El Gobierno del estado de Florida ha abierto oficialmente las inscripciones para su tradicional y polémico programa anual de caza de caimanes, una práctica que combina elementos de recreación, control poblacional y negocios, al tiempo que reaviva el debate sobre la ética en la intervención humana sobre la fauna silvestre.
El programa, que comenzó en 1988 como una estrategia estatal para reducir la población de caimanes en cuerpos de agua dulce y zonas pantanosas, permite a los participantes capturar hasta dos ejemplares por temporada. Este año, el período autorizado para la caza se extenderá del 15 de agosto al 31 de diciembre.
Los interesados deben presentar sus solicitudes antes del 2 de junio, y aquellos seleccionados recibirán un permiso oficial con las instrucciones y regulaciones correspondientes. La Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida ha señalado que la iniciativa busca mantener un equilibrio ecológico y reducir los riesgos de encuentros peligrosos entre caimanes y seres humanos, especialmente en áreas residenciales cercanas a hábitats naturales.
El programa genera opiniones divididas entre quienes lo consideran necesario para el manejo de especies y quienes lo critican por fomentar prácticas que afectan el bienestar animal.