|
Getting your Trinity Audio player ready...
|
Washington, D.C. — La Casa de la Moneda de Estados Unidos anunció oficialmente el fin de la producción del centavo de dólar, conocido como penny, tras 232 años de historia. La medida busca reducir costos y responde a la progresiva pérdida de relevancia de esta moneda en la economía moderna.
Los últimos pennies fueron acuñados este miércoles en la Casa de la Moneda de Filadelfia, donde se fabricaban desde 1793, apenas un año después de que el Congreso aprobara la Ley de Monedas. La decisión, impulsada por el expresidente Donald Trump, se fundamenta en que el costo de producción de cada centavo había ascendido a casi cuatro centavos.
“Durante demasiado tiempo, Estados Unidos ha acuñado pennies que literalmente nos cuestan más de dos centavos. ¡Esto es tan derrochador!”, escribió Trump meses atrás en una publicación en línea.
Una medida abrupta que genera nostalgia y confusión
Aunque el Departamento del Tesoro proyecta un ahorro anual de 56 millones de dólares, la eliminación del centavo ha causado desconcierto entre consumidores y comerciantes. Algunos minoristas comenzaron a redondear precios o pedir cambio exacto a los clientes, mientras otros ofrecieron premios simbólicos a quienes entregaran monedas de 1 centavo.
“Hemos estado abogando por la abolición del centavo durante 30 años, pero esta no es la forma en que queríamos que sucediera”, lamentó Jeff Lenard, portavoz de la Asociación Nacional de Tiendas de Conveniencia.
A lo largo del último siglo, cerca del 50 % de las monedas producidas en las Casas de la Moneda de Filadelfia y Denver fueron pennies. Sin embargo, hoy su uso en transacciones es prácticamente nulo, y la mayoría se acumulan en cajones o frascos como objetos de colección.
Un símbolo que marcó la identidad estadounidense
Más allá de su valor monetario, historiadores y coleccionistas consideran al centavo un símbolo cultural. Frank Holt, profesor emérito de la Universidad de Houston, explicó que estas monedas son “un registro histórico de más de dos siglos, reflejando la política, la religión, el arte y los ideales de la nación”.
Desde 1793, el centavo acompañó el desarrollo de Estados Unidos, marcando hitos en su historia económica y social. Su desaparición pone fin a una era, dejando atrás uno de los íconos más reconocibles de la vida cotidiana estadounidense.




