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El Primer Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional fijó para el 12 de enero el inicio del juicio preliminarcontra Antonio y Maribel Espaillat, propietarios de la discoteca Jet Set, vinculados a la tragedia ocurrida la madrugada del 8 de abril durante un concierto del merenguero Rubby Pérez, donde murieron 236 personas y más de 180 resultaron heridas.
La fecha fue establecida luego de que el Ministerio Público presentara su acusación formal, solicitando que se abra proceso judicial contra los hermanos Espaillat. Ambos enfrentan imputaciones por homicidio involuntario, así como golpes y heridas involuntarias. Aunque fueron detenidos en junio, recuperaron la libertad condicional días después.
Graves fallas estructurales y negligencia en Jet Set
Según la investigación, la discoteca operaba con deficiencias críticas en mantenimiento, infraestructura y medidas de seguridad, condiciones que comprometieron la integridad de clientes y empleados. Estas irregularidades, sumadas a la negligencia en la gestión del evento, fueron determinantes para el catastrófico desenlace que ha marcado un antes y un después en la historia de la seguridad en lugares de entretenimiento en el país.
Arranca un proceso judicial clave para las víctimas
El Ministerio Público ha reunido durante meses evidencias técnicas, testimonios y peritajes para sustentar la acusación. El juicio preliminar determinará si los imputados enfrentarán un juicio formal y cuáles podrían ser las sanciones por los delitos atribuidos.
Familiares de las víctimas han expresado su deseo de que el proceso sea transparente, riguroso y sin impunidad, subrayando la necesidad de sentar precedentes que eviten que tragedias como esta vuelvan a repetirse en la República Dominicana.
Un caso que marca un precedente en seguridad y responsabilidad
Las autoridades reiteraron que la responsabilidad en la gestión de locales de entretenimiento es esencial y que el cumplimiento de las normas es vital para proteger vidas. El caso Jet Set continúa siendo un recordatorio doloroso de cómo la negligencia puede provocar pérdidas humanas irreparables.
El seguimiento ciudadano y la atención mediática al proceso serán determinantes para garantizar que la justicia actúe con firmeza, enviando un mensaje claro sobre la responsabilidad civil y penal en eventos masivos en el país.




