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SANTO DOMINGO. – Los sectores energía y minería continúan afianzándose como los principales motores de atracción de inversión extranjera directa (IED) en República Dominicana, al captar en conjunto US$1,164.1 millones entre enero y octubre de 2025, informó este domingo el ministro de Energía y Minas, Joel Santos.
El funcionario destacó que esta cifra representa el 40.2 % del total nacional, que en los primeros diez meses del año ascendió a US$2,892.8 millones, consolidando a ambos sectores como pilares fundamentales del crecimiento económico y la estabilidad del país.
Energía: el mayor receptor de capital extranjero
Santos detalló que el sector electricidad recibió US$743.5 millones, equivalente al 25.7 % de toda la IED, superando incluso a áreas tradicionalmente dominantes como turismo, minería e inmobiliario.
Atribuyó este desempeño al notable avance de las energías renovables, que ya representan el 25 % de la matriz energética nacional, reflejo de la apuesta del Gobierno por la eficiencia, la diversificación y la sostenibilidad.
Minería: crecimiento histórico
El ministro informó que la actividad minera captó US$420.6 millones, equivalente al 14.5 % de la inversión total y registrando un extraordinario crecimiento interanual de 440 %.
Este repunte confirma la importancia estratégica del sector minero dentro de la economía dominicana, especialmente en un contexto global retador.
Confianza en la estabilidad del país
“El liderazgo de los sectores energético y minero en la captación de inversión extranjera reafirma la confianza de los inversionistas en la estabilidad del país, su seguridad jurídica y la visión de transición energética que impulsa el Gobierno”, afirmó Santos.
Comparativamente, otros sectores registraron:
- Turismo: US$647.7 millones (22.3 %)
- Inmobiliario: US$399.8 millones (13.8 %)
- Comercio, zonas francas, financiero, transporte y telecomunicaciones: entre 9.7 % y 1.8 %
Tendencia positiva hacia cierre de año
Santos recordó que, durante los últimos tres años, el sector energético ha mantenido una recepción superior a US$1,000 millones anuales, cifra que se proyecta al alza para el cierre de 2025.
Este crecimiento sostenido, señaló, es producto de un clima favorable para la inversión, un marco regulatorio robusto y la incorporación constante de nuevas tecnologías que están transformando el sistema eléctrico dominicano.
