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PONCE, PUERTO RICO. – El desembarco y movimiento de tropas estadounidenses continuó este fin de semana en el puerto de Ponce como parte del mayor refuerzo militar que Estados Unidos ha ejecutado en el Caribe en más de treinta años. Un equipo de Reuters presenció en la madrugada del sábado la llegada de personal y material bélico, trasladados desde un buque militar hacia instalaciones logísticas ubicadas junto al puerto, antes de su reubicación en el Campamento Santiago, donde se desarrollarán operaciones y ejercicios en los próximos días.
La operación forma parte del despliegue anunciado por Washington desde agosto y ampliado recientemente como estrategia para presionar al gobierno de Venezuela y combatir redes criminales en la región.
Desembarco masivo y logística militar intensiva
Las imágenes captadas muestran a decenas de soldados descendiendo de vehículos de transporte, formando filas y movilizándose bajo la supervisión de la Policía Militar en un perímetro altamente vigilado. De manera paralela, personal especializado descargaba contenedores, cajas y armamento liviano de varios camiones y unidades tácticas, en un operativo continuo que se extendió durante toda la mañana.
Una larga columna de vehículos militares permaneció en espera mientras el flujo de tropas avanzaba hacia los puntos de embarque establecidos, en un protocolo que destacó por su organización y eficiencia.
Maniobras marítimas frente a la costa de Ponce
La jornada también incluyó ejercicios de la Marina estadounidense con embarcaciones de colchón de aire LCAC, utilizadas para operaciones anfibias. Las naves realizaron aproximaciones a tierra, maniobras de velocidad y recorridos de ida y vuelta, demostrando un amplio despliegue de capacidades tácticas tanto en mar como en tierra.
Un despliegue sin precedentes recientes
Según datos oficiales citados por Reuters, la operación involucra un contingente de más de 7.000 soldados y una poderosa fuerza naval y aérea integrada por:
- El portaaviones USS Gerald R. Ford
- 6 destructores, 3 buques anfibios, 1 crucero lanzamisiles
- 1 submarino nuclear
- Aeronaves P-8A Poseidon, bombarderos B-52H Stratofortress, drones MQ-9 Reaper
- Helicópteros y unidades de fuerzas especiales
El incremento de actividad militar coincidió con sobrevuelos recientes de bombarderos estratégicos B-52H cerca de Curazao, en proximidad a la costa venezolana, confirmados por registros de Flightradar24.
Contexto geopolítico y lucha contra el crimen transnacional
Washington sostiene que parte de estos recursos están destinados a combatir redes de narcotráfico asociadas al denominado Cártel de los Soles, señalado por EE. UU. de operar con apoyo de altos mandos del ejército venezolano. Desde 2020, fiscales federales estadounidenses han presentado cargos de narcotráfico y terrorismo contra Nicolás Maduro y varios de sus colaboradores, manteniéndose una recompensa de USD 50 millones por la captura del mandatario.
Paralelamente, el Pentágono ha confirmado la existencia de planes de contingencia para escenarios relacionados con una posible transición política en Venezuela.
Operación continúa
Durante toda la jornada del sábado, soldados y equipos continuaron con tareas de desembarco, preparación logística y ejercicios costeros. Las maniobras de los LCAC se extendieron hasta avanzada la tarde, en preparación para la siguiente fase de entrenamientos en Campamento Santiago, prevista para los próximos días.
Este despliegue marca un momento clave en la postura militar estadounidense en el Caribe, al tiempo que aumenta la tensión regional en medio de un escenario geopolítico altamente sensible.
