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Washington, EE. UU. – El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, instó este lunes a mantener bajo control los precios del petróleo en medio de un escenario de alta volatilidad en los mercados internacionales, generado por las recientes tensiones entre Washington y Teherán.
“TODOS, MANTENGAN LOS PRECIOS DEL PETRÓLEO BAJOS. ¡ESTOY VIGILANDO!”, escribió Trump a través de su red Truth Social, minutos después de la apertura de Wall Street. El mandatario también advirtió que permitir que el precio del petróleo se dispare “sería hacerle el juego al enemigo” e instó al Departamento de Energía a intensificar la producción con un mensaje directo: “¡PERFORA, BABY, PERFORA!!! ¡AHORA!!!”.
Los comentarios del mandatario se producen mientras Irán ha prometido represalias por los bombardeos estadounidenses del fin de semana contra instalaciones nucleares en Isfahán, Natanz y Fordow. Una de las opciones planteadas por el régimen iraní sería cerrar el estrecho de Ormuz, paso estratégico por el que transita alrededor del 20 % de la producción mundial de petróleo.
Tras los ataques, el precio del crudo Brent y el West Texas Intermediate (WTI) subieron más de un 4 %, alcanzando su punto más alto desde enero. Sin embargo, conforme avanzó la jornada y las noticias sobre la libre circulación en Ormuz se confirmaron, los precios mostraron una leve corrección a la baja, aunque la incertidumbre sigue presente.
En este contexto, las bolsas europeas y los principales índices de Wall Street abrieron con pérdidas moderadas, a la espera de la respuesta oficial de Irán y de nuevas acciones por parte de Estados Unidos o sus aliados.
Mientras tanto, Israel ha intensificado su ofensiva en territorio iraní, apuntando a objetivos considerados símbolos del régimen. Entre los blancos atacados se encuentra la entrada de una prisión conocida por albergar disidentes políticos y una sede de fuerzas de seguridad responsables de la represión de protestas recientes. Las autoridades israelíes han señalado que los ataques continuarán durante los próximos días, aunque niegan buscar un cambio de régimen.
Pese a esto, Trump dejó entrever esa posibilidad con una publicación en la que escribió: “Si el actual régimen iraní no puede HACER IRÁN GRANDE OTRA VEZ, ¿por qué no habría un cambio de régimen???”. La Casa Blanca trató de matizar esta afirmación, asegurando que el presidente estaba “simplemente planteando una pregunta”, pero en Teherán fue percibida como una provocación directa.
En este clima de tensión geopolítica y económica, el mercado petrolero se convierte nuevamente en un eje de presión e influencia global, con Trump apostando por la producción nacional como herramienta para contener los precios y evitar un nuevo golpe inflacionario.
