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Esmeralda Cruz Familia, de 35 años, fue asesinada por su compañero sentimental, quien usó un arma ilegal
Santo Domingo. – Una nueva tragedia por violencia de género conmociona al país tras el asesinato de una mujer identificada como Esmeralda María Cruz Familia, de 35 años, a manos de su pareja Wascar Díaz Otaño, de 41, quien posteriormente se quitó la vida. El hecho ocurrió en una residencia del callejón de Los Platanitos, en el sector Los Ríos, en el Distrito Nacional.
Hallazgo trágico tras cita médica y viaje pendiente
Según el reporte policial, el suceso habría ocurrido la tarde del viernes, aunque fue en la mañana del sábado cuando las autoridades realizaron el levantamiento de los cuerpos. La hermana de la víctima, María Estefani Cruz Familia, encontró la escena tras acudir preocupada al lugar, al no lograr contactar a Esmeralda y confirmar que no había llegado a Las Matas de Farfán, su pueblo natal, donde planeaba viajar ese mismo día.
Al no recibir respuesta en la residencia —ubicada en el segundo nivel de un edificio cercano a la avenida Los Próceres—, pidió ayuda para derribar la puerta y halló los cuerpos de la pareja en el piso.
El arma usada era ilegal
La Policía Nacional confirmó que Wascar Díaz Otaño utilizó una pistola marca Browning, calibre 9 milímetros, la cual portaba de forma ilegal. Las autoridades investigan los antecedentes del arma y si había denuncias previas por violencia intrafamiliar.
Vecinos no sospechaban nada: “Se veían normales”
En declaraciones al Diario Libre, una vecina identificada como Josefina explicó que la pareja llevaba aproximadamente dos meses residiendo en el lugar. “Cada uno tenía su vehículo, y los veía entrar por separado. Nunca imaginé que pudieran tener problemas”, expresó.
La comunidad no percibió el crimen. “Alguien escuchó un disparo, pero pensó que era al aire”, añadió la vecina.
El entorno continúa con aparente normalidad
El domingo en la tarde, la vivienda ya estaba vacía tras el traslado de los cuerpos a Las Matas de Farfán, mientras en el entorno —marcado por el silencio que deja la tragedia— niños jugaban en el callejón y algunos vecinos conversaban en un colmado cercano.
Feminicidios que duelen: un llamado urgente a actuar
Este nuevo caso reaviva el clamor nacional por políticas más firmes contra la violencia de género, así como mayor vigilancia sobre el uso ilegal de armas de fuego. Esmeralda se suma a una lista de víctimas que, como tantas otras, dejaron señales ignoradas por un sistema que aún no logra detener la violencia dentro del hogar.
Desde Portada Nacional, expresamos nuestra solidaridad con la familia Cruz Familia y reiteramos nuestro compromiso con el periodismo responsable que visibiliza estas realidades para que no se repitan.
Redacción digital – Portada Nacional
