El exjugador del FC Barcelona, Gerard Piqué, ha sido citado como investigado en el caso conocido como «Brody». La investigación se centra en posibles irregularidades relacionadas con comisiones de aproximadamente US$ 4 millones, presuntamente pactadas con la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) para llevar la Supercopa a Arabia Saudita.
El Juzgado de Instrucción número cuatro de Majadahonda, encargado de la causa, ha señalado que los acuerdos firmados entre la RFEF y las autoridades saudíes en septiembre de 2019 incluían una prima de éxito de esa cantidad anual para un tercer agente mientras se realizara el evento en Arabia Saudita. La Justicia sospecha que Piqué recibiría estas comisiones en su rol de representante de la empresa Kosmos.
Hasta ahora, CNN está intentando obtener una respuesta de la defensa de Piqué.
En abril de 2022, Piqué se pronunció sobre las posibles irregularidades a través de la red social Twitch, cuando comenzaron a surgir filtraciones en algunos medios nacionales. En sus declaraciones, afirmó: “Creo que todo lo que hemos hecho es legal. Quiero dar la cara porque no tengo nada que esconder. Todo lo que hacemos en Kosmos y todo lo que he hecho yo a título personal pues, no es que me esconda, es que me siento orgulloso”.
Este caso ha generado una gran expectación y debate sobre la transparencia y legalidad en los acuerdos deportivos internacionales, con Piqué en el centro de la polémica debido a su implicación como representante de Kosmos.
