NUEVA YORK.- Este jueves en la mañana, agentes del FBI ingresaron en la residencia oficial del alcalde de Nueva York, Eric Adams, incautando su teléfono como parte de una investigación en curso. Horas después, un jurado investigador presentó cargos penales aún no revelados contra el alcalde demócrata.
El abogado de Adams, Alex Spiro, calificó la acción como un «espectáculo», asegurando que habrían entregado el teléfono sin problemas. El alcalde no ha sido arrestado hasta el momento.
La investigación ha generado una serie de allanamientos y renuncias en su círculo cercano, mientras las autoridades federales investigan posibles irregularidades en la recaudación de fondos de campaña y tráfico de influencias.
En un discurso grabado desde su residencia, Adams prometió defenderse de las acusaciones, afirmando que es «un objetivo» en un caso basado en «mentiras». Las autoridades no han revelado qué leyes presuntamente fueron violadas.