Este viernes, los rusos comienzan a votar en unas elecciones presidenciales de tres días, en medio de la ofensiva en Ucrania y con la certeza de la reelección del presidente Vladimir Putin, quien lleva 24 años en el poder.
Putin, de 71 años y en el poder desde el año 2000, busca revalidar su mandato por otros seis años. El proceso electoral inició en la península de Kamchatka, en el extremo oriental de Rusia, y concluirá el domingo en Kaliningrado.
La votación también se lleva a cabo en los territorios ocupados por Rusia en Ucrania y en Transnistria, un territorio separatista prorruso en Moldavia.
Se prevé que Putin obtenga una victoria abrumadora en estas elecciones, ya que se enfrenta a tres candidatos que no se oponen a su política exterior ni a la represión interna.
Las autoridades electorales excluyeron a los pocos candidatos de la oposición que intentaron competir contra Putin, y una encuesta estatal predice que obtendrá más del 80% de los votos.
Sin embargo, la viuda de Alexéi Navalni, principal opositor del Kremlin fallecido recientemente en prisión, llamó a los rusos a votar por cualquier candidato excepto Putin, instando a la protesta.
Mientras tanto, tanto Moscú como Kiev informaron de muertes civiles en los últimos bombardeos en Ucrania, un conflicto que ha escalado en los últimos días con ataques de ambos lados y provocando alertas aéreas en la región fronteriza entre Rusia y Ucrania.
La situación tensa y los recientes incidentes en Ucrania han provocado preocupaciones sobre la seguridad durante las elecciones, pero las autoridades rusas aseguran haber repelido incursiones de combatientes ucranianos y están preparadas para garantizar la estabilidad en la región.
