Una vez más, lamentamos reportar un trágico accidente en nuestras carreteras. Esta vez, la carretera La Romana-Bayahibe, en la hermosa provincia de La Altagracia, fue el escenario de una tragedia que ha dejado tres personas sin vida y otras tres heridas.
Imaginemos por un momento el dolor y la angustia que esto ha causado a las familias involucradas. Tres vidas perdidas, tres personas heridas y un dolor que perdurará.
Todos nosotros, como miembros de esta comunidad, debemos unirnos para hacer un llamado a la prudencia en las carreteras. La seguridad vial es responsabilidad de todos, y cada uno de nosotros puede marcar la diferencia. Conducir con precaución, respetar las leyes de tránsito y ser conscientes de las condiciones de la carretera son pasos clave para prevenir tragedias como esta.
Es esencial recordar que la velocidad y la distracción al volante son factores que a menudo desencadenan accidentes. Tomémonos un momento para reflexionar sobre nuestra propia conducta al volante. Cada vez que nos ponemos al volante, tenemos la oportunidad de tomar decisiones que pueden salvar vidas. Hagámoslo por el bien de nuestra comunidad y de todos aquellos que compartimos las carreteras.
Nuestras condolencias van para las familias afectadas por esta trágica pérdida. Sigamos adelante con un espíritu de solidaridad y responsabilidad, trabajando juntos para evitar futuras tragedias en nuestras carreteras.
